Dubrovnik es una ciudad ideal para recorrer a pie. Casi todo lo que hay que ver se encuentra en el casco antiguo, en su mayor parte peatonal, por lo que se puede acceder caminando a casi cualquier sitio.
Pero a pesar de esto, en algún momento de tu viaje tendrás que hacer uso de algún medio de transporte para visitar algún museo o restaurante ubicado fuera de las murallas, para realizar alguna excursión fuera dela ciudad o, al menos, para desplazarte desde el puerto o el aeropuerto hasta tu hotel o al centro de la ciudad.
Autobús, coche de alquiler, ferry
El principal medio de transporte en la Perla del Adriático es el autobús. Hay una amplia red de líneas operadas por la compañía Libertas.
Otra idea muy recomendable, sobre todo para realizar visitas fuera de Dubrovnik, es la del coche de alquiler. Sin embargo, hay que descartar esta opción como medio para moverse por la ciudad.
Para dar el salto a las islas Elaphiti e incluso visitar las localidades costeras del norte de Dalmacia, tenemos a nuestra disposición la excelente red de transporte marítimo que ofrecen las compañías Jadrolinija y G&V Lines. También hay barcos turísticos que zarpan del Puerto de Gruz y que ofrecen pequeños cruceros de un día para descubrir la belleza de la ciudad desde otra perspectiva. También tendrás que tomar el ferry para visitar la isla de Lokrum, justo en frente de las murallas de la ciudad.
El teleférico de Dubrovnik
Hay todavía un medio de transporte que sin duda hay que usar al menos una vez durante tu viaje a Dubrovnik: el teleférico, la mejor manera de subir al punto más alto de la ciudad, la colina de Srd, y visitar la Fortaleza Imperial donde se ubica el Museo de la Guerra de la Independencia.
El teleférico (en croata, žičara) fue construido en el año 1969 y desde entonces ha transportado a más de dos millones y medio de pasajeros. En apenas cinco minutos asciende a más de 400 metros de altura brindando a sus ocupantes unas increíbles vistas de la ciudad.
Las taquillas y la estación se encuentran en la calle Buža. El billete de ida y vuelta cuesta 120 HRK (unos 16 €).
Por último hay que señalar que si tienes pensado moverte mucho por la ciudad y tienes previsto visitar muchos museos y monumentos, vale la pena hacerse con la Dubrovnik Card, una tarjeta de 1, 3 ó 7 días de validez con la que, además de tener entrada libre a los museos y descuentos en comercios y restaurantes, podremos utilizar el transporte público de forma gratuita.