Si tu estancia en Dubrovnik va a ser algo más que una simple visita fugaz, no debes dejar pasar la oportunidad de realizar alguna que otra excursión fuera de la ciudad y descubrir algunos de los innumerables tesoros que esconden Croacia y los países vecinos.
Para todas estas aventuras fascinantes necesitarás un vehículo, por lo que te recomendamos alquilar un coche. Dependiendo de cuantos días vayas a disponer, podrás elegir entre una visita cercana o un recorrido más largo. Las emociones están aseguradas en ambos casos.
Excursiones de un día
Una excursión ideal para salir por la mañana, pasar el día y dormir de nuevo en Dubrovnik es la de Trsteno, un hermoso y exótico jardín asomado al Adriático a solo 20 kilómetros de la ciudad.
También un día basta para disfrutar del puerto amurallado de Ston, desde el cual se puede dar el salto a la vecina isla de Korcula, la cuna de Marco Polo. Sin embargo, para sacarle el jugo a esta excursión lo ideal es pasar, al menos, una noche allí.
Rutas largas
Dubrovnik, la Perla del Adriático, es sin duda la joya de la corona de la Costa Dálmata, pero no la única maravilla que esconde esta región privilegiada. Por eso, si se dispone de varios días, es una excelente idea lanzarse a recorrer sus islas y sus puertos, desde la península de Istria hasta las ciudades patrimonio de la Humanidad de Split y Trogir, sin olvidarnos de la isla Krk y sus playas.
A lo largo de la costa dálmata hay más de mil islas, cada una con su encanto especial, a las que viajar una y otra vez sin cansarte.
Por otra parte, abandonando Dalmacia e internándonos ya en el interior de Croacia, nos espera uno de los lugares más bonitos de europa y tal vez del mundo, el orgullo de Croacia: el Parque Nacional de los Lagos de Plitvice.
Al otro lado de la frontera
Debido a su extraña configuración geográfica, Dubrovnik ocupa un curioso emplazamiento dentro de Croacia, en el extremo sur, al final de un largo corredor marítimo, lejos de la capital Zagreb. Esto tal vez sea una desventaja para sus habitantes, pero ofrece a los viajeros una oportunidad de oro para conocer interesantes destinos que se encuentran al otro lado de la frontera.
Así, en tan solo uno o dos días podemos conocer los lugares más turísticos de la vecina Bosnia Herzegovina: Mostar y su icónico puente, la capital Sarajevo (llamada la «Jerusalén de Europa»), o Medjugorje, destacado destino de peregrinación religiosa.
Del mismo modo podemos viajar hacia el sur, cruzando la frontera de Montenegro y disfrutando de la bella ciudad de Kotor y su bahía, una desconocida maravilla del Adriático.